Este personaje tiene, dentro de la psicología popular dominicana, un destacado lugar porque “se da” en todo “ambiente”, por difícil y hostil que parezca. El diccionario lo equipara al que usa loas, sinónimo de alabardero, adulón, “tumba polvo”, “limpia saco”, o lambiscón, definiéndolo como “delator o persona muy aduladora”. Manifestado en cualquier género, sin preferencias, tan dañino uno como el otro. De significado múltiple en lo vernáculo, el adjetivo que le acompaña lo define de manera específica. Uno se dedica a destacar atributos y características, por lo general inexistentes, de aquel que tiene el poder de favorecer o perjudicar, o simplemente de manera “guabinosa”, “resbalosa”, “babosa”, “aceitosa”, procura acomodar la voluntad ajena, para obtener resultados adecuados a su intención. También es “aprovechador de oportunidades”, usualmente comida o bebidas, para disfrutar de algo pagado por otro. El lambón cultiva los espacios entre invitaciones formales y la dificultad pa